El párroco sevillano Juan Fernández-Salvador, más conocido como Padre Jota, lleva 6 años entregado a cubrir las necesidades que sufre la población desfavorecida de la región de Hualmay, a 150 km de Lima, y a llevar el mensaje del evangelio en la Parroquia de la Sagrada Familia de la Diócesis de Huacho. Los voluntarios que lo acompañan cada verano en Perú se involucran aún más en su causa organizando cada año una gala con la que recaudar fondos. En esta ocasión es este viernes el día elegido para que los sevillanos puedan prestar su apoyo a la misión del Padre Jota en Perú. Comida y buena música serán los ingredientes de la fiesta donde actuarán grandes voces como Soto, Las seventies y Siempre Así.
¿Cómo es Hualmay?
Tiene unos 30.000 habitantes. Allí viven en casas de estera o de ladrillo y ves muchas calles sin asfaltar, solo de tierra. En general la gente sobrevive.
¿Cuál es la ayuda más inmediata que necesitan?
Hay un colectivo muy marginado que son los niños con discapacidad. Las instituciones de Perú están empezando ahora a darse cuenta de que hay que dedicarles tiempo y atención. Hemos construido un centro de rehabilitación para estos niños que está prácticamente terminado a falta de equipar. Va a ser el centro de rehabilitación más importante en toda la región de Lima, el más moderno y el mejor equipado de toda la zona.
Es para esta labor la recaudación de la gala, ¿no es así?
Sí. Como dice un refrán andino: lo que doy me lo doy y lo que no doy me lo quito. La gente tiene que darse cuenta que la solidaridad es un valor en alza y que ser solidario es rentable. La abundancia de la vida termina devolviendo el 101% de lo que tú das.
A parte del centro de rehabilitación, la labor que realizáis es mucho más amplia
Tenemos 6 instituciones educativas. Tres colegios de inicial con 500 niños a los que damos una alimentación equilibrada para que se vayan a sus casas comidos, porque son de familias con escasos recursos. También tenemos un colegio para 50 niños con discapacidad y un colegio de primaria y secundaria. Por último, un centro de oficios con 500 alumnos para formarlos. Aparte de los centros educativos, damos de comer cada día a 100 ancianos en un comedor social y tenemos un centro médico de medicina alternativa.
¿En esos 6 años qué lleva allí qué ha visto nacer?
Hemos construido dos colegios desde que estoy allí, el de discapacitados y el de primaria y secundaria, que se llama el Liceo Español.
¿Está recibiendo apoyo de los sevillanos?
Sevilla es una ciudad solidaria, siempre está en cada gala. Siempre hemos encontrado muchas empresas de catering y de alimentación que nos apoyan durante las 2 horas en las que pasamos bandejas. Además, la fiesta la organizan los mismos voluntarios que han estado allí en Hualmay. Unos 20 voluntarios.
¿Cuántas personas se reunirán allí el viernes?
Normalmente asiten nas 800 personas. Y los voluntarios hacen un gran despiegle, tanto en barra, guardarropa o donde se les necesite.
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