Exigen sanción ejemplar para docente de la UNJFSC por negligencia

SANCION EJEMPLAR A DOCENTE UNIVERSITARIO JUAN CHUQUILÍN ALBILDO POR NEGLIGENCIA Y ACTITUD INHUMANA: Dos estudiantes de enfermería sufrieron graves quemaduras en laboratorio y acaba de fallecer una de ellas.

Una vez más nuestra universidad se encuentra de duelo. Un sueño, una juventud, un esfuerzo, una vida se ha cortado. Como es sabido el día viernes 08 de enero, las estudiantes del primer ciclo de enfermería se encontraban en plena prácticas de laboratorio en la Universidad Nacional José Faustino Sánchez Carrión de Huacho, Jesenia Leidy Romero Vega (17) al momento de encender un mechero que estaba deteriorado y con rajaduras entre la cerradura de la tapa, se le derramó el alcohol y en ello se desplazó el fuego por su guardapolvo. Ella, entre sus prendas vestía una blusa de material licra y el fuego avanzó en instantes provocándoles quemaduras hasta de tercer grado, dichas llamas alcanzaron a Lizbet Rumiche pero en menor proporción. La actitud inhumana, cobarde e irresponsable del docente Juan Chuquilín Arbildo quien en esos instantes en lugar de asistir inmediatamente a la estudiante JESENIA, opto por proteger un televisor y cables que estaban alrededor. El domingo 31 de enero ha fallecido
Esta actitud no debe de quedar impune. Se debe de tener en cuenta que siendo las estudiantes ingresantes del primer ciclo, este mal docente tenía la obligación de tomar las medidas preventivas de como encender los mecheros malogrados y no haber permitido que se emplee un encendedor común y corriente.
Si bien es cierto la realidad precaria de la mayoría de los laboratorios de la Faustino Sánchez Carrión está latente, al mismo tiempo el riesgo general, pero ello no exime la gran responsabilidad de los docentes a cargo de los laboratorios en tomar medidas preventivas.
No existe en la mayoría de laboratorios químicos como de procesamientos, extinguidores y donde hay están con fecha de vencimiento según las normas de seguridad civil. La mayoría no cuentan con agua, no hay duchas de seguridad, equipos de protección personal. Y para redondear casi no hay reactivos, el estudiante tiene que comprar los tubos de ensayo o “donarlos”, etc.
Otra actitud que se rechaza y se condena, es también a la Comisión de Órgano y Gestión, quienes no han apoyado oportunamente a las estudiantes victimas y menos han demostrado capacidad y la simplificación administrativa del caso para situaciones adversas como la que se han dado.
La familia no cuenta con medios económicos suficientes para realizar los gastos, incluso de sepelio y para superar con especialistas todos los traumas posteriores al sepelio.
El pago por concepto de seguro que le cobran a todo los ingresantes, no es cancelado oportunamente al hospital del IPSS y por ello el estudiante no cuenta con la atención pertinente, amén de los matasanos y corta piernas que existen en los hospitales del Perú.
Esperamos que la fiscalía proceda con la celeridad del caso, que el docente Juan Chuquilín, la universidad y el Hospital ALMENARA de Lima paguen una reparación civil a los familiares de Yessenia Leidy Romero. Que se sancione ejemplarmente al docente Juan Chuquilín Arbildo, si es posible con la expulsión de la Universidad y que también se le investigue por presuntos cobros económicos por aprobar a los estudiantes de diversas escuelas académicas donde ha enseñado.
No olvidarse también de la otra estudiante Lizbeth Rumiche, quien sufrió menores quemaduras pero, los gastos deben ser en parte asumidos por la Universidad.
Estudiante Yessenia Leidy Romero Vega, descansa en paz.

Atte.
ALEXANDER PALACIOS: Coordinador de Prensa del Frente de Defensa de la UNJFSC.