Las estudiantes protestaron luego de que las obligaran a mostrar su ropa interior a las maestras, pues se cree que cuando las mujeres menstrúan no pueden tocar a otros estudiantes ni entrar a los templos.
68 estudiantes universitarias del Instituto Shree Sahajanand Girls (SSGI), dirigido por la secta Swaminarayan, grupo religioso conservador, fueron obligadas a desnudarse y mostrar su ropa interior a sus maestras, que buscaban comprobar si alguna de ellas se encontraba menstruando.
Las jóvenes fueron obligadas a salir del aula e ir al baño, en donde les ordenaron quitarse sus prendas y entregar su ropa interior para que sea inspeccionada. Los hechos ocurrieron el pasado martes, en la ciudad de Bhuj.
De acuerdo con la BBC, las jóvenes aseguraron que un funcionario del albergue en el que viven se quejó con el director de la universidad, pues indicó que las estudiantes infringían las reglas que deben seguir las mujeres cuando menstrúan: no pueden entrar a templos, a las cocinas ni tocar a otros estudiantes. ¿Otra medida? Durante las comidas deben sentarse alejadas de los demás estudiantes, lavar sus propios platos y, en el aula de clases, sentarse en la última fila.
Registro
Una de las estudiantes afectadas aseguró que el albergue en el que se hospedaban llevaba un registro, en el que cada una debía escribir su nombre cada vez que empezaba a menstruar; así, las autoridades podían “identificarlas”. La joven también contó a la BBC que ninguna de ellas había escrito su nombre en el documento, ya que no quieren enfrentar las restricciones que tienen que tolerar.
Es por esta razón que el funcionario del albergue se quejó ante el director, que a su vez creyó que era grave que las jóvenes menstruaran “entrando a la cocina, acercándose a los templos y mezclándose con otras jóvenes del albergue”. Luego de ser desnudadas e inspeccionadas, las jóvenes calificaron lo hecho como una “tortura mental”.
Uno de los padres de las alumnas alegó que cuando llegó a la universidad a ver a su hija, ella y otras jóvenes se acercaron a él y lloraron. “Están en shock”, aseguró.
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