miércoles, 2 de julio de 2014

El mayor desafío que tendrán los catedráticos para ser principales es el grado de Doctor

Tras la aprobación de la nueva Ley Universitaria, el Consejo Nacional de Educación (CNE) considera importante que la comunidad académica, y la opinión pública, estén informadas. Esto permite generar un alturado intercambio de ideas, documentadas y que se orienten a fomentar una educación superior de calidad. Para ello, y siendo el CNE un órgano plural en el que convergen diversas personalidades, el boletín Educación al Día ofrece estos días una serie de entrevistas hechas a los consejeros vinculados al ámbito universitario.
El vicepresidente del CNE, Dr. Manuel Burga, ex rector de la Universidad San Marcos y actual vicerrector de la Universidad Antonio Ruiz de Montoya, consideró un paso importante las nuevas exigencias para los profesores universitarios, que ahora deberán tener el grado de Magister para enseñar. “Actualmente, en universidades como San Marcos solo el 22% de profesores tiene ese grado y, con la nueva norma, hay que procurar que llegue al 100%. Para ser Profesor Principal se necesitará el grado de Doctor con esta nueva ley. Este es el mayor desafío que tendrán los docentes universitarios, a los cuales hay que recordarles que esta exigencia se tuvo en los años 40, 50 y 60, en que todos los docentes universitarios eran doctores. Es una tradición internacional”, refirió Burga.
Al ser consultado sobre la dudosa calidad que tienen muchas maestrías, comentó que la ley ha dejado abierta la posibilidad de fomentar la calidad en las maestrías. “Lo que muchos docentes y autoridades están esperando es que la Cuarta Disposición Complementaria Final sea financiada por el gobierno para que las escuelas de postgrado públicas puedan elevar su calidad. Ese es un compromiso que el gobierno puede asumir a través del incremento presupuestal o por medio del Pronabec”, dijo Burga.
Sobre el Sunedu, indicó que aun tiene un tinte intervencionista. “Esperamos que el ente regulador sea integrado por las personas más adecuadas, con experiencia, solvencia académica, y reconocimiento público, porque de no ser así, volveremos a caer en la inoperancia, en los malos manejos y en la corrupción”. Aún hay tiempo para que el Ejecutivo cambie algunos aspectos o proponga una norma adicional donde se puedan establecer ciertos criterios con mayor claridad, dijo.
“Los estudiantes no tienen que preocuparse mucho, deben organizarse mejor y la universidad deberá procurar que los cursos de talleres o seminarios de tesis terminen con el trabajo de investigación”, mencionó al preguntársele su opinión sobre la eliminación del bachillerato automático. Sobre la elección de autoridades, dijo que la norma debería ser estándar para las universidades públicas y privadas, por ello –agregó- que lo más inteligente sería que las universidades privadas democraticen la elección de sus autoridades como lo han hecho las casas de estudios: PUCP, Cayetano Heredia o Pacífico.
Finalmente, sobre la posición de la ANR de presentar acciones de inconstitucionalidad la calificó como una forma de irrespeto al Estado. “Ellos creen que es inconstitucional porque han perdido sus cargos. Hay que tener coraje y valentía para mirar más allá del propio ámbito personal”, mencionó Burga.
 
Fuente: CNE Prensa.

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